El pasado fin de semana fue electa la nueva junta directiva del Congreso de la República. Como era de esperarse, la mafia política designo a Álvaro Arzú Escobar como presidente del Congreso, hijo del alcalde dictador Arzú quien enfrenta justicia por tráfico de influencias, financiamiento ilícito, entre otros. Como vicepresidente nombran a Felipe Alejos del partido Todos, hermano de Gustavo Alejos, detenido por negocios ilícitos en Salud Pública, y como secretarios resaltan los nombres del Kaibil criminal Galdámez y Karla Martínez, hija de la diputada Sofía Hernández. De esta forma se consolida el pacto de corruptos y mafiosos en el Congreso.
No cabe duda que la mafia política no se da por vencida, por mas deslegitimada, por mas perseguida que se encuentre en este momento. Con la elección de la nueva junta directiva del Congreso se percibe un contraataque por parte de los huéspedes de Mariscal Zabala, dirigida contra el señor Iván Velásquez de la CICIG y buscaran garantizar quien sustituya a Thelma Aldana como fiscal general del MP, sea alguien sobornable, aliada a sus intereses y de esta forma intentaran colapsar la lucha contra la corrupción.
La mafia política intentara negociar con la comunidad internacional como lo hemos visto desde el ejecutivo, trataran de complacer los intereses Corporativos comprometiendo irresponsable y de manera desmedida la soberanía nacional, el respeto a los derechos fundamentales de nuestros pueblos. En este sentido, no debemos quitar la atención a la agenda legislativa, porque seguro priorizaran los intereses empresariales sobre los derechos laborales con la aprobación de la ley de Servicio Civil, trataran de aprobar el Reglamento de Consulta promovida por la Cámara de Industria que atenta contra las decisiones comunitarias, contra las consultas de buena fe y que solo busca preparar la pista de aterrizaje de las empresas para despojar nuestros territorios. De igual forma, se encuentran en el listado de prioridades la Ley de Competencias, la Ley de Aguas, entre otras.
Ante esta realidad, debemos redoblar esfuerzos de organización, alianzas y amplias movilizaciones para evitar retrocesos y detrimentos a nuestras conquistas históricas. No debemos permitir la formalización de las violaciones a nuestros derechos fundamentales, así como la institucionalización de la represión contra nuestras organizaciones y pueblos que luchan.
Solo un Nuevo Estado, arrancará de raíz la corrupción e impunidad¡
Huehuetenango, 15 de enero de 2018
CONSEJO DE PUEBLOS WUXHTAJ