El Neoliberalismo Militarista: Empresas, Gobiernos y Ejércitos En Santa Cruz Barillas, Guatemala

El caso Hidro Santa Cruz

  


2. Los orígenes de un capital espurio

 

13 de mayo de 2012. La página web de Hidralia Energía permanece sin cambios  desde el martes 1, cuando cae asesinado Andrés Francisco Miguel. No se ha modificado a pesar de que la seguridad de la empresa es acusada del asesinato. Estática: como si la violencia, la represión, el miedo y la muerte no se estuvieran apoderando de Santa Cruz Barillas.
 
Al margen de la violencia y la conflictividad, la web de Hidralia oscila entre el ocultamiento, la autocomplacencia y las afirmaciones absolutas, inapelables en su rotundidad. 
 
Las afirmaciones rotundas: Hidralia Energía pretende “contribuir al cambio de la matriz energética de los países donde actuamos, mediante el impulso de proyectos hidroeléctricos de pequeña escala y de bajo impacto ambiental, así como mejorar las condiciones de vida de las personas que viven allí donde desarrollamos proyectos (…) Nuestros valores son, entre otros: ética y transparencia en todos nuestros procesos de desarrollo, respeto a la cultura y valores de nuestros stakeholders”
 
La autocomplacencia: menciones genéricas a proyectos exitosos, el autobombo de la responsabilidad social corporativa (12 láminas de zinc donadas para las familias de la comunidad Caserío Quechoc).
 
Los ocultamientos: ¿qué sabemos de Ecoener, Hidralia Energía y su filial Hidro Santa Cruz[1]? ¿Qué sabemos de sus propietarios? ¿Cuáles son sus antecedentes, sus capacidades, sus expectativas en el desarrollo de proyectos hidroeléctricos en Guatemala? ¿Cuáles sus redes de apoyo y conexiones? La información corporativa es escasa y llena de vacíos en este punto.
 
Este escrito pretende contribuir al conocimiento de la historia del grupo empresarial (o la red político-empresarial) que administra Hidro Santa Cruz. Historia que, como analizo a continuación, se sustenta en el ejercicio de la corrupción y se construye sobre una base ideológica y política ultraconservadora: ambos aspectos determinantes para entender la actuación de la empresa en Barillas y la violencia que se genera.   
 
 
 
 
Los reyes del kilovatio
 
Según su brochure corporativo, Hidralia Energía es una empresa fundada en 2006 en  A Coruña, Galicia, norte de España, que ofrece “un servicio global en materia de proyectos hidroeléctricos, abarcando estudios y diseños, así como gestión, proceso de aprobación, obtención de licencias y financiación”. En septiembre de 2008, la empresa inaugura su oficina en Guatemala, desde la que atiende proyectos de la región centro y latinoamericana. En Guatemala: Proyecto Cambalam I y II en Santa Cruz Barillas, a cargo de Hidro Santa Cruz; proyectos Pojom I, Pojom II y Bella Linda, en el municipio de San Mateo Ixtatan, a cargo de Producciones de Desarrollo Hídrico; asesorías y consultorías para el impulso de energías renovables en Huehuetenango y Alta Verapaz.
 
Informes complementarios revelan que Luis Castro Valdivia es fundador de Hidralia y representante legal de Hidro Santa Cruz. Su hermano David es el Director CEO (Chief Executive Officer) de Hidralia, propietario y accionista mayoritario de Hidro Santa Cruz.
 
Más allá de la leyenda oficial, y según la opinión de la fiscalía del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, TSXG, que investiga la denominada “Trama energética”, Luis Castro Valdivia crea desde finales de los años 80 un entramado de más de cuarenta empresas vinculadas al sector energético, con diferentes nombres pero frecuentemente una misma razón social y administración: a cargo del propio Luis Castro Valdivia, sus hermanos David y Javier, o personas interpuestas. El entramado pretende salvar las restricciones legales existentes para la labor de una sola empresa.
 
En el periodo 1999-2005, cuando su cuñado Ramón Ordás funge como Director general de Industria, Energía y Minas de la Xunta de Galicia[2], Castro Valdivia recibe concesiones que lo convierten en uno de los empresarios más prósperos del sector: el llamado “rey del kilovatio gallego”, por su hegemonía en el mercado de las pequeñas centrales. En los años en que expande sus acciones a Guatemala (a partir de 2006), el TSXG acusa a Luis Castro Valdivia y a su cuñado de tráfico de influencias, prevaricación y cohecho en la obtención de contratos energéticos.
 
Las actividades fraudulentas se repiten como constante. Se denuncia la constitución de una “maraña” integrada por decenas de “sociedades extensas y opacas, empresas de recientísima creación, con nula experiencia, formadas con capital inicial muy escaso, y sin soporte material, personal ni técnico para el desarrollo de sus actividades”.Empresarios y empresas que, entre otras estrategias, desarrollan sus negocios a partir del “ocultamiento de personas, la formación de empresas pantalla[3], las concesiones irregulares…”  
 
La Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galiza, ADEGA, define una ruta de corrupción e impunidad alrededor de Castro Valdivia: “incompatibilidades, falsificación de registros y agilización de trámites, corrupción y chafallada[4] administrativa, trámites administrativos express, declaraciones ambientales a la medida”. 
 
David Castro Valdivia, hermano de Luis y propietario de Hidro Santa Cruz, forma parte de esta red de poder y corrupción. Aunque su presencia pública es menos visible, aparece –entre otros- involucrado en la criticadísima Hidroeléctrica de Chandrexa de Queixa, en el municipio gallego del mismo nombre, presidida por el  alcalde de la localidad -pese a ser empresa privada- y ubicada de forma anormal en un Parque Natural. David Castro es pieza clave en el proyecto de Barillas.
 
Si bien las acusaciones por tráfico de influencias, prevaricación y cohecho fueron desestimadas por el  Juzgado de Instrucción número 1 de A Coruña en 2010, una sentencia del TSXG de 23 de junio de 2011 confirma la corrupción y las malas prácticas de los proyectos. Ante una demanda contra la anulación de tres contratos de minicentrales interpuesta por Energías del Deza, una de las empresas de Castro Valdivia, TSXG vuelve a argumentar la irregularidad de los proyectos presentados. Entre otros motivos, porque “no se incluyó un estudio de sinergias donde se evalúen los efectos de la instalación de estos nuevos aprovechamientos; no se hizo la descripción de los métodos en orden a conocer la repulsa o aceptación social de este proyecto; no se incluye el estudio comparado de la situación ambiental”
 
 
 
Un conglomerado político y económico ultra conservador
 
Para el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, la investigación de la trama energéticaconfirma la existencia de pequeñas empresas con grandes aspiraciones. Planteo esta lectura complementaria: grandes ambiciones e intereses, disfrazados de inversiones societarias en apariencia discretas…
 
Las investigaciones evidencian importantes intereses económicos y alianzas políticas alrededor de los reyes del kilovatio:
 
el Director General de Industria, Energía y Minas de la Xunta de Galicia en el periodo 1999-2005, durante el gobierno ultraconservador de Manuel Fraga y el Partido Popular;  
el presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia, Antonio Fontenla (quien compró a Luis Castro la primera empresa que este fundó, la Hidroeléctrica del Arnoya, en 1992), vinculado a la derecha económica y política;
el exalcalde socialista de A Coruña (Galicia) y actual embajador de España en el Vaticano, Francisco Vázquez. Iglevaz, la sociedad creada por el presidente de la patronal gallega, Antonio Fontenla, pasó en 2002 a manos de la familia del Alcalde, que inició una fuerte relación con Luis Castro Valdivia. A pesar de su filiación socialista, Francisco Vázquez se identifica con sectores conservadores;
la esposa y los dos hijos de Francisco Vázquez, también copropietarios de negocios energéticos;  
alcaldes e integrantes de partidos políticos, sobre todo del Partido Popular gobernante;  
el presidente del gobierno autónomo de Galicia, fundador del Partido Popular y anteriormente ideólogo del franquismo, Manuel Fraga Iribarne. Durante su gestión al frente del gobierno autónomo, las empresas de Castro Valdivia y sus asociados incrementan sus negocios. El propio Luis Castro Valdivia fue responsable de Novas Xeracións, la rama juvenil del Partido Popular.
 
Las conexiones empresariales y políticas revelan la preeminencia de una base ideológica ultraconservadora en la conformación y actuación del grupo Hidralia Energía: vinculada directamente o heredera de planteamientos políticos provenientes de la derecha española y del franquismo-fascismo, con el añadido neoliberal. Ideología“rancia y autoritaria” como define Manuel Vázquez Montalbán el carácter de uno de sus fundadores y personaje presente este relato, Manuel Fraga Iribarne, pieza clave de la dictadura franquista.
 
Adelanto como hipótesis (se profundiza en siguientes reportajes) que la base histórica ultraconservadora de este grupo genera dos escenarios clave para Barillas:
 
Los contextos de restricción de libertades, gobiernos autoritarios, Estados de sitio o excepcionalidad facilitan el desarrollo de las acciones del grupo.
La relación del grupo con las comunidades está determinada por la imposición, la unidireccionalidad y  el autoritarismo, en un marco doctrinal de raíces fascistas.  
 
Y un tercer escenario posible, donde la violencia se convierte en la clave de la actuación. 
 
 
 
 
Hidro Santa Cruz: la continuación de prácticas fraudulentas
 
Año 2008. La existencia de acusaciones públicas contra Luis Castro Valdivia no impide su expansión en  Guatemala y América Latina. Por el contrario, la creación de Hidralia Energía y la proyección del grupo hacia Latinoamérica coinciden con el fin de la gestión del Director General de Industria, y el inicio de las investigaciones de contratos energéticos.
 
Septiembre de 2008. Se inaugura la sede de Hidralia Energía en Ciudad de Guatemala. Sé, porque yo mismo lo precisé en el artículo anterior, que este reportaje no ficciona la realidad. Sin embargo, no puedo evitar conjeturar sobre esa inauguración. ¿Se realizó una fiesta? ¿Estuvieron presentes en ese momento Luis Castro y su hermano David? ¿Hubo discursos de inauguración? ¿Cuáles fueron los contenidos de esos discursos? ¿Se hicieron proyecciones, se valoró la posible reacción y oposición social al proyecto?
 
Es hipótesis, lo dejo al azar de la imaginación: probablemente asistieron empresarios, misiones internacionales, representantes de la Embajada de España o el embajador mismo. ¿Qué otras personas fueron invitadas: comisionados de empresas transnacionales interesadas en distribuir la energía producida por Hidro Santa Cruz, posibles inversionistas, autoridades políticas, partidarias?
 
¿Se mencionaron en ese momento las acusaciones todavía abiertas contra Luis Castro Valdivia? Pregunto si se mencionaron porque descarto que se desconocieran.
 
De cualquier modo hago la pregunta directa: ¿desconocían las autoridades nacionales estas críticas? ¿Y la Embajada de España? ¿Se informó, se alertó a los ministerios, las alcaldías y las comunidades sobre este particular? ¿Qué actitud asumen ahora, a partir de la agudización del conflicto y la presentación pública de información sobre el grupo propietario de Hidralia Energía e Hidro Santa Cruz?
 
Hasta aquí puedo interrogarme e hipotetizar: este escrito, reitero, no es ficción ni recreación novelada.
 
2007 en adelante. En Galicia se mencionan las irregularidades en la tramitación de las concesiones para Castro Valdivia: falta de expedientes de valoración de impacto ambiental; ocultamiento de información; vulneración de la legislación ambiental; un comportamiento empresarial irrespetuoso hacia las poblaciones afectadas. Todo ello llevado a cabo por empresas carentes de capacidad técnica, personal y material y por empresas pantalla que ocultan los nombres de los propietarios.
 
En el espejo del proyecto hidroeléctrico de Santa Cruz Barillas se reflejan estas prácticas empresariales:
 
confusión de siglas: Ecoener, Hidralia, Hidro Santa Cruz (Producciones de Desarrollo Hídrico en San Mateo Ixtatán) que responden sin embargo a la misma propiedad;
confusión de nombres: representante legal (Luis Castro Valdivia), propietario y máxima accionista (David Castro),  mandatario legal y apoderado Fernando Alonso, entre otros;
ocultamiento de nombres: Luis Castro Valdivia no aparece identificado en la página web corporativa;
una sociedad de creación recientísima, Hidro Santa Cruz, que recibe de forma expedita un contrato energético, sin experiencia previa ni capacidad técnica, humana, administrativa y social demostrada,
una empresa pequeña que obtiene contratos múltiples en diferentes países: ejecutora de proyectos en España, Venezuela, Honduras, Guatemala, Nicaragua, Ecuador y Venezuela,
ambigüedad o contradicciones en la existencia de concesiones y permisos ambientales y legales,
escasa o nula preocupación por la opinión de las comunidades y su rechazo al proyecto: la imposición de mentalidades y lógicas autoritarias. 
 
Es buen momento para tomar un respiro y recapitular. En atención a los que acaban de sintonizar esta serie de reportajes que no son novelas, y asisten a la relación de nombres que no forman parte de una saga, creo conveniente ofrecer un resumen y una interpretación de los hechos hasta ahora mencionados. 
 
Recupero el hilo conductor lanzado en la introducción: en Santa Cruz Barillas no solamente se concretan los intereses de una pequeña empresa, sino de un complejo y diversificado entramado de poder, históricamente construido a partir de la corrupción, y con el conservadurismo ideológico como seña de identidad. Este entramado traslada sus prácticas fraudulentas a cada uno de los proyectos que ejecuta, en este caso Guatemala y el proyecto Cambalam.
 
13 de mayo de 2012. La página web de Hidralia Energía permanece sin modificaciones desde el martes 1, cuando es asesinado Andrés Francisco Miguel…
 

[1] Las tres empresas responden a una misma propiedad.

[2] Gobierno autónomo.

[3] “De 48 empresas que figuran en el Registro Mercantil a nombre de Luis Castro Valdivia, 36 disponen de apenas tres domicilios sociales. El valor total de las empresas es de 61 millones de euros, y sin embargo solamente consta un trabajador como único asalariado afiliado a la seguridad social. En algún caso aparecen registrados gastos de representación por valor de 900,000 euros, que es el pago a alguna de las personas que participa en estas sociedades” informa la Coordinadora Galega para a Defensa dos Ríos, COGADER.

[4] Mantengo el término original en idioma gallego por su carga connotativa. Traducción aproximada: trabajo muy mal hecho.
 
 
 
 
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Siguiente capítulo

 
Un modo de operar estructurado y repetitivo: el desarrollo energético e hidroeléctrico “a como sea”

 

 

1.   Introducción

 
En la serie de reportajes que ahora inicio propongo una lectura de la conflictividad reciente en Santa Cruz Barillas (concretada en el establecimiento de un Estado de Sitio) a partir de:
 
· Historia y caracterización del grupo empresarial que actúa en Barillas (Hidro Santa Cruz, también identificada como Ecoener e Hidralia) y sus estrategias de actuación.
· Los intereses económicos transnacionales presentes en el conflicto y el mapa de actores coincidente con estos intereses.
· Las vinculaciones del conflicto en Barillas con la conformación de un Estado progresivamente autoritario y neo militar.  
 
A partir de estas lecturas, concluiré que Hidro Santa Cruz (publicitada como una empresa pequeña, con pequeños y legítimos intereses) forma parte de un complejo entramado empresarial que desarrolla sus acciones en varios paises, de forma directa o a través de conexiones políticas y/o familliares. Una red económica que vincula a decenas de empresas e intereses de corte similar y que involucra asimismo a importantísimas corporaciones financieras internacionales (International Finance Corporation-World Bank Group, entre otras).
 

Desvelaré un entramado político conexo, sustento de esta red económica, construido a partir de lazos partidarios y con gobiernos, en esferas estratégicas de toma de decisión (igualmente, en diferentes países). Como podrán apreciar en los reportajes, este entramado se construye a partir de procedimientos legales o de la ilegalidad criminal.

 
Compartiré con ustedes formas de trabajo y estrategias de expansión basadas en la negociación y el otorgamiento de beneficios sociales, pero también la compra de voluntades, sobre todo de autoridades; el desprecio de la opinión de las comunidades; el uso de mecanismos informales y paralelos (paralegales); la imposición; el neocolonialismo. Estas formas de trabajo, repetidas en muchos de los países y proyectos impulsados por este conglomerado, conforman un modus operandi y una cultura organizativa.
 

Cuestionaré la calidad medioambiental y social de los proyectos de Hidro Santa Cruz: mientras la empresa se presenta como amigable con el ambiente, oferente de soluciones energéticas comunitarias y alternativas, ubicaré la responsabilidad social empresarial y los mecanismos de desarrollo limpio como nuevos espacios para la acumulación; las micro centrales como táctica de expansión multinacional, no como respuesta social; y el agua (privatización, gestión de servicios) como ámbito fundamental de acumulación para los próximos años. El control de este recurso determina espacios de lucha y nuevas estrategias de penetración a las que no es ajena Hidro Santa Cruz.

 
Evidenciaré la inserción de Hidro Santa Cruz en los esquemas de expansión transnacional: es decir, Hidro Santa Cruz como parte de un modelo corporativo y no como alternativa empresarial.
 
Por fin, concluiré que la fuerza de la expansión y la dureza de los planteamientos de Hidro Santa Cruz solamente pueden entenderse a partir de la magnitud de los intereses, los apoyos y las redes de poder involucradas. En este marco, el Estado de Sitio recientemente decretado en Barillas no es consecuencia de hechos aislados de violencia, sino una condición para la acumulación. 
 
 
 
Historia no novelada  
 
A lo largo de esta introducción y cinco reportajes, aparecen señores y reyes del kilovatio (similares a nuestros reyes del pollo o reyes del tenis); oligarquías transnacionales; dirigentes de partidos en el gobierno en varios países; un importante embajador español en el Vaticano; más de 40 negocios de características similares al proyecto de Barillas, que ubican a este como parte de un complejo de poder y una determinada forma de operar.
 
La investigación es profusa en la denuncia de complejas redes criminales, de las que forman parte empresarios acusados de tráfico de influencias, prevaricación y cohecho en la adjudicación de permisos de explotación energética. Entre estos empresarios acusados y felizmente absueltos, figura el representante legal de Hidro Santa Cruz, Luis Castro Valdivia, hermano del propietario y máximo accionista de dicha empresa y Director General CEO de Hidralia Energia, David Castro Valdivia (ambos presentes en diferentes momentos en Barillas y Guatemala).    
 
En el esfuerzo de ubicar contextos históricos, llegamos hasta la Segunda Guerra Mundial, las explotaciones de wolframio fundamentales para nutrir la maquinaria bélica del Ejercito nazi, y la base de constitución de un importante patrimonio económico, que se amplificó durante el franquismo (dictadura española) y del que Hidro Santa Cruz -lo reconozca o no- es su heredera, con todo lo que conlleva: herencia de mentalidades paternalistas y autoritarias, típicamente fascistas.
 
¿Piensan que estoy exagerando? Me adelanto a algunas reacciones de la empresa:
 
¡Por favor! ¡Hablamos de Barillas, un municipio fronterizo y marginal que a nadie interesa! 

 
La hidroeléctrica del río Cambalam, que gestiona Hidro Santa Cruz, tiene apenas una potencia nominal de 5,000 kW, tensión de evacuación de energía de 69,000 V y caudal de equipamiento de 2.25metros cúbicos por segundo, con 5.80 km de longitud de línea de evacuación (hasta Subestación Barillas). Es imposible que a su alrededor se desarrollan todos estos intereses. ¡Modérese señor Cabanas!
 
Hidralia Energía e Hidro Santa Cruz son empresas de menos de 20 empleados, alejadas del entramado capitalista global que usted quiere evidenciar.
 
Sus reportajes parecen pataleta marxista-ambientalista-criminal, señor Cabanas, conspiración  proveniente de un grupo de revoltosos, antisociales, resentidos, frustrados, mediocres y, en su caso particular, redundante y pésimo escribidor.
 
Algunos de los hechos que usted menciona fueron sobreseídos por la Justicia española (es decir, todos fuimos culpables hasta que se demostró nuestra inocencia).
 
En anticipo de estas reacciones, confirmo que los nombres y hechos que se presentan corresponden a personas y situaciones reales; las opiniones provienen de actores involucrados en el conflicto; los datos ofrecidos tienen como fuente documentos y opiniones externadas y autorizadas para la publicación por parte de las personas entrevistadas. Estos reportajes no parten de la ficción, no son una recreación novelada de la realidad. 
 
 
 
Esquema general 
 
Esta serie de reportajes, construidos durante más de 14 meses en tres países distintos, se desarrollan con este esquema: 
 
Capítulo 1. Los orígenes de un capital espurio
Relato de la conformación un poderoso sector energético a partir de sus nexos económicos y políticos con grupos/estados fascistas o profascistas. En esta historia, la corrupción y el autoritarismo han sido premisas, sin punto de inflexión. Se vincula a este sector energético con el grupo Hidralia Energía y su accionar en Santa Cruz Barillas. 
 
Capítulo 2. Un modo de operar estructurado y repetitivo: el desarrollo hidroeléctrico y energético «a como sea». 
Análisis comparativo de estrategias de operación de Hidralia Energía, en diferentes proyectos  realizados en varios países. Se evidencia que estas estrategias utilizan de forma complementaria: negociación, compra de voluntades, presión, paternalismo y asistencialismo económico, alianzas formales o ilegales, amenazas, uso de la violencia. 
 
Las estrategias, que incluyen organización interna, relaciones con las comunidades, relaciones con otros actores, desarrollo de proyectos, conforman una cultura organizacional de conglomerado corporativo, es decir, regida por las lógicas de expansión y organización transnacional, acusadamente vertical, poco accesible, no dialogante. 
 
Capítulo 3. La Pinta, La Niña, La Santa María y la Santa Cruz, etapa de acumulación primaria agresiva transnacional. 
Lectura del conflicto en Barillas partiendo de la revisión de los intereses nacionales y globales presentes en la expansión de la hidroeléctrica, y que inciden en la conflictividad: el agua como eje de expansión fundamental; los nuevos negocios: responsabilidad social, desarrollo limpio; nuevas estrategias de expansión: las minicentrales hidroeléctricas. 

 
Esta lectura se completa con el análisis de actores involucrados, en su dimensión local, nacional e internacional, que van mucho más allá de los actores formalmente representados y visibilizados en Barillas. Encontramos actores de la cooperación y la anticooperación, del Estado y el gobierno, de empresarios y gobiernos internacionales confundidos en su accionar. 
 
Capítulo 4. El Estado militarista. 
Propongo la comprensión del Estado de Sitio como una de las garantías de soporte del funcionamiento y acumulación de las empresas, en este caso de Hidralia Energía, en el marco de la conformación de un modelo económico, político y social marcadamente autoritario, de libertades restringidas.
 

Capítulo 5. El código vida: razones de la oposición comunitaria a la presencia de la empresa y al Estado de Sitio.

A partir de la caracterización de los intereres (en muchos casos ocultos, superpuestos) presentes en el conflicto de Barillas, presento como legítima la oposición al Estado de Sitio y a la presencia de la empresa, legitimidad fundamentada en la defensa de intereses comunitarios de ámbito superior al mercantilista, y en el ejercicio de la autonomía, la soberanía y la capacidad intransferible de decisión por parte de los habitantes de Barillas.

 

 
Algunas preguntas que no pueden quedar sin respuestas
 
Al final de esta serie de reportajes, algunas preguntas deben encontrar contestación: 
 
¿Cuáles son los nexos previos de Hidralia Energía con la población de Barillas y con Guatemala?
 
¿A través de qué mecanismos una empresa recién formada acaba siendo ejecutora de importantes proyectos hidroeléctricos?
 
¿De qué manera empresarios acusados de tráfico de influencias, cohecho y prevaricación en sus países de origen, trasladan estas prácticas a sus proyectos en otros países? 
 
¿Por qué una empresa pequeña llega a generar una aguda conflictividad social, y se convierte en protagonista a partir de la implantación de un Estado de Sitio en el municipio en el que está trabajando?
 
¿Cuáles son las relaciones de Hidro Santa Cruz con las autoridades locales y nacionales? 
 
¿Qué conexiones y afinidades políticas y económicas internacionales construyen la presencia de Hidralia en Guatemala?
 
En fin, las respuestas iniciales abren nuevas interrogantes y ubican a la hidroeléctrica Santa Cruz, a la población de Barillas, a las luchas por la defensa del territorio, en un entramado de poder y en una encrucijada histórica: un modelo de expansión empresarial frente a la voluntad de las comunidades. 
 
Si esto fuera una novela, no parecería más extraordinario que lo que voy a compartir en los capítulos siguientes.

 
 

Andrés Cabanas

 
Comunicación CPO.

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